La vuelta al colegio tras las vacaciones estivales es un momento clave para padres y niños, que conlleva una serie de cambios en sus hábitos de vida. Para los más pequeños, después de una época llena de actividades, juegos y excursiones, la vuelta al cole suele conllevar un estilo de vida más sedentario. En el aspecto psicológico, regresar a la rutina escolar puede generar emociones y nervios. Estos factores, combinados con una alimentación inadecuada pueden contribuir a que su tránsito intestinal sea más lento.[ii]Para evitar estas molestias conviene aprovechar el inicio del nuevo curso para inculcar en los niños pautas de alimentación y hábitos de vida saludables tanto en casa como en el colegio.
Y es que las consultas en pediatría por molestias gastrointestinales son frecuentes y ocupan actualmente uno de los primeros lugares en la asistencia pediátrica. Estudios recientes muestran que el 67% de los niños sufren algún tipo de molestia digestiva.[iii][iv]El estreñimiento, las diarreas y el dolor abdominal son las molestias con una mayor frecuencia. El estreñimiento, en concreto, es un problema muy común que se diagnostica al 25% de los niños remitidos a un gastroenterólogo pediátrico.1
Las molestias digestivas sufridas por los más pequeños son, principalmente, el estreñimiento (45% de prevalencia), los gases y las flatulencias (38% de prevalencia) y los dolores abdominales (23%).2
En la mayoría de los casos, las molestias digestivas no se producen por ninguna enfermedad si no que se deben a un lento funcionamiento del intestino fruto de una dieta inadecuada, incumplimiento de horarios, vida sedentaria o periodos de nervios y estrés en el colegio, como el que representa el inicio del curso. Estos síntomas además de alterar la calidad de vida de los pacientes que los sufren, también alteran la de sus familias.3
En opinión de Marta Olmos, nutricionista del Programa NUSA,
“un niño con estreñimiento tiene muchas probabilidades de tener este problema cuando sea adulto”
Por ello, es importante educarles desde pequeños en base a unas pautas de alimentación e hábitos higiénicos, saludables.
Cómo evitar el estreñimiento en la infancia
El primer paso para mantener una buena salud digestiva es seguir una alimentación equilibrada y variada que incluya, entre otros alimentos, 5 raciones de frutas y hortalizas. Cierto es que en los niños constituye un verdadero reto conseguir que coman este tipo de alimentos, pero es preciso ofrecerles menús y recetas que resulten sugerentes y apetecibles para ellos, combinando texturas y colores, fomentando la variedad y el equilibrio de una alimentación saludable.
Otra forma complementaria de cuidar el bienestar digestivo de los niños de un modo sencillo es introducir a diario leches fermentadas con Bífidus ya que pueden disfrutar de una amplia gama de sabores que les resultan muy apetecibles.
Alimentación y hábitos saludables.
Según Marta Olmos,
“la vuelta a la rutina puede ser un excelente momento para mejorar los hábitos de toda la familia: comer en familia, siguiendo una alimentación adecuada, que incluya cereales integrales, frutas y hortalizas, legumbres, leches fermentadas con Bifidus y un adecuado consumo de agua es una pauta dietética eficaz para ayudar a mejorar el tránsito intestinal lento tanto en adultos como en niños”.
Tan importante como la alimentación es motivar la práctica regular de actividad física. Evitar que el niño pase muchas horas delante de la televisión o el ordenador y fomentando la práctica de ejercicio físico moderado les ayudará a regular el tiempo de tránsito intestinal. Asimismo, puede resultarles una vía de escape para destensar el nerviosismo que en muchas ocasiones puede ser causa de incomodidades digestivas.
Las medidas dietéticas deben asociarse a un entrenamiento del hábito de ir al baño. Muchas veces los niños ignoran o “se olvidan” de las ganas de ir al bañoporque prefieren seguir jugando2. Ayudarles a adquirir el hábito de ir al baño cada día, siempre a la misma hora o cuando tengan la necesidad, en un ambiente relajado, se convierte en una sana rutina para un buen tránsito intestinal.
Por último, para lograr una vuelta al cole los más saludable posible y preservar el bienestar digestivo de los niños, los expertos recuerdan que respetar el horario de las comidas, 5 al día, e ingerir la cantidad suficiente de líquidos.
El programa NUSA
El Programa NUSA cumple una función educativa y social vinculada a los temas de nutrición y salud, centrando su actividad en la investigación, la formación, la información y la educación.
Las actividades realizadas en el marco del Programa NUSA se dirigen a los profesionales de la nutrición y la salud, a la prensa y a los consumidores agrupados por aspectos de salud comunes.
NUSA fomenta la investigación y desarrolla materiales formativos e informativos para los colectivos profesionales relacionados con el sector de la sanidad. Así mismo, lleva a cabo acciones de educación para niños y jóvenes.