Las quince mayores empresas españolas, unidas en el Consejo Empresarial para la Competitividad, avanzaron el pasado día 19 de marzo que la crisis ha tocado fondo y se puede esperar un crecimiento del PIB del 0,3% a final de año, aunque habrá que esperar a 2014 para que se transforme en empleo.
Una afirmación que no es un comentario voluntarista. Es el resultado de un ajuste, urgente y doloroso, en la Administración, la legislación laboral y fiscal y el endeudamiento público. Todo para volver a hacer de España “un país de oportunidades”. No obstante a los ciudadanos de a pie, después de tanto “brotes verdes” como aparecieron con el gobierno anterior, no lo tomemos entre interrogantes.
Fuente: José Morales Martín