La Plataforma para la Segregación de Fornells amenazaba al Ayuntamiento de Es Mercadal con denunciarlo por la vía penal si en el tiempo en que se resuelve el contencioso por la independencia del pueblo, vende cualquier elemento del patrimonio público.

El Alcalde, Ramón Orfila, afirmaba estar frente a un chantaje inaceptable y que la Plataforma para la Segregación de Fornells cree vivir en la época de la Inquisición. Aseguraba que seguiría adelante con las inversiones previstas en Fornells y que si fuese necesario, vendería patrimonio para financiar las obras.

En su escrito, la Plataforma también exigía que el Ayuntamiento, en un plazo de 15 días, manifestase públicamente no tener intención de vender ninguna propiedad. De no ser así, decían que también acudirían a los Tribunales. Según Ramón Orfila, el planteamiento era un gran disparate.

El Ayuntamiento de Es Mercadal anunciaba el día 1 de diciembre por la mañana un Plan de inversiones en Fornells, por valor de 225.000.000,00 pesetas, en los próximos años.

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