El Parlamento Europeo ha aprobado una propuesta de resolución en el que demanda un mayor esfuerzo a la UE y a los Estados miembros en el apoyo a las pequeñas y medianas empresas, para que puedan convertirse en los verdaderos motores del crecimiento económico. “Si no posibilitamos mejores condiciones de financiación para los empresarios y simplificamos los trámites para crear nuevas empresas, estaremos ahogando nuestras posibilidades de crecimiento, de creación de empleo y de competitividad”, alerta desde Estrasburgo la eurodiputada del PP Rosa Estaràs.
La europarlamentaria popular recuerda que en la UE hay 23 millones de pymes, que en España son cerca de 1.300.000, mientras que en Islas Baleares la cifra se acerca a las 87.000. “Desde la UE disponemos de los recursos legales y financieros para apoyar a estas empresas, que representan el 99% de nuestro tejido empresarial”, apunta Estaràs.
Por esa razón, recuerda, es preciso que las instituciones comunitarias pongan todos los medios para que los cerca de 140.000 millones de euros que la política de cohesión destina a las pymes en el periodo 2014-2020 “tengan un uso adecuado y que verdaderamente dediquemos los fondos de desarrollo regional para apoyar la competitividad de las pymes, animar las exportaciones y la economía verde”, subraya.
La eurodiputada popular apuesta por prestar apoyo para la creación de empleo desde estas empresas y por facilitar su acceso a la financiación para invertir en el desarrollo del capital humano y en las capacidades de las personas.
“Creemos que las pymes constituyen la espina dorsal de la economía de la Unión y cuentan con un enorme potencial de creación de empleo, pues son responsables del 85% de los puestos de trabajo de nueva creación, y son el motor principal del crecimiento económico europeo a largo plazo y de la creación de oportunidades de empleo sostenible en los 28 Estados miembros”, resume la eurodiputada, que celebra el apoyo dado por la Cámara a este informe.
En el texto, además, se pide a las autoridades encargadas de la gestión que tengan en cuenta las características y las competencias específicas de los territorios individuales, con especial atención a los que sufren niveles elevados de subdesarrollo, despoblamiento y desempleo, a fin de promover tanto a los sectores económicos tradicionales como a los innovadores. “Nuestras Islas son un territorio especial y como tal debe ser tratado por la UE en este aspecto, ya que las dificultades para sacar adelante una empresa en una isla son mayores y es preciso que se tenga en cuenta esta circunstancia para apoyar de forma conveniente a nuestros empresarios”, recuerda Rosa Estaràs.